Exdirector de Abercrombie & Fitch detenido por tráfico sexual tras investigación del FBI
Según los informes, el acusado se aprovechaba de su poder e influencia en la industria de la moda para reclutar a las víctimas
El exdirector ejecutivo de Abercrombie & Fitch, Mike Jeffries, fue detenido el martes por la mañana junto con su pareja, Matthew Smith, y un presunto intermediario, James Jameson, en el marco de una investigación federal sobre tráfico sexual y prostitución interestatal. La operación, llevada a cabo por el FBI, ha destapado un esquema que supuestamente implicaba el abuso sexual y explotación de hombres jóvenes en eventos organizados tanto en Nueva York como en otras partes del mundo.
La investigación, que comenzó el año pasado, surgió a raíz de denuncias que señalaban a Jeffries y Smith como responsables de organizar "eventos sexuales" donde los hombres eran coaccionados para participar en actividades sexuales. Según los informes, los acusados se aprovecharon de su poder e influencia en la industria de la moda para reclutar a las víctimas.
Un abogado que representa a algunas de las presuntas víctimas confirmó las detenciones a la BBC, señalando que estos arrestos son un "enorme primer paso hacia la obtención de justicia para las muchas víctimas que fueron explotadas y abusadas a través de este esquema de tráfico sexual que [el acusado] operó durante muchos años bajo la cobertura legítima que Abercrombie proporcionó."
Jeffries, Smith y Jameson enfrentan un cargo de tráfico sexual y 15 cargos de prostitución interestatal vinculados a 15 presuntas víctimas. La acusación presentada el martes detalla cómo los tres acusados habrían utilizado tácticas coercitivas y fraudulentas para reclutar y forzar a hombres jóvenes a participar en actos sexuales, bajo promesas de beneficios y fama dentro de la industria del modelaje.
Según los documentos judiciales, los acusados organizaron "eventos sexuales" en diversas ciudades del mundo, aprovechándose de su posición en la industria de la moda para atraer a jóvenes promesas. Los testimonios señalan que a las víctimas se les ofrecían oportunidades profesionales, pero que en realidad eran engañadas para participar en actividades sexuales.
Uno de los ejemplos más reveladores es el de David Bradberry, antiguo modelo de Abercrombie & Fitch, quien demandó a la empresa de moda alegando que Jeffries operó este esquema durante sus 22 años como director ejecutivo de la compañía. Bradberry, de 23 años en ese momento, afirmó que le "dejaron claro" que si no accedía a prácticas sexuales con el intermediario, no tendría la oportunidad de reunirse con Jeffries.
"Era como si estuvieran vendiendo fama, y el precio era la obediencia," declaró Bradberry a la BBC.
Abercrombie & Fitch y el legado de Jeffries
Mike Jeffries dirigió Abercrombie & Fitch durante más de dos décadas, dimitiendo en 2014 tras un fuerte descenso en las ventas de la compañía. Dejó la empresa con un paquete de jubilación valorado en unos 25 millones de dólares. Aunque en ese momento no se conocían las acusaciones actuales, su salida estuvo marcada por una serie de controversias relacionadas con la imagen y las prácticas empresariales de la compañía.
Los cargos que enfrenta ahora son extremadamente graves. Según la legislación estadounidense, el tráfico sexual incluye inducir a un adulto a viajar a otro estado o país para mantener relaciones sexuales a cambio de dinero, utilizando la fuerza, el fraude o la coacción.
Hasta el momento, ni Jeffries ni Smith han emitido declaraciones públicas sobre su arresto. Ambos han negado previamente cualquier implicación en delitos relacionados con tráfico sexual. Las autoridades continúan recopilando pruebas y testimonios, mientras las víctimas esperan que se haga justicia por los años de abuso y explotación.
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