Fernando Ulises Ramírez Vázquez salió a festejar al Cruz Azul, pero fue víctima de la masacre en Apaseo el Alto
El joven bombero es una de las ocho víctimas del ataque armado
La celebración de una noche de triunfo deportivo terminó en tragedia para Fernando Ulises Ramírez Vázquez, un joven bombero de 26 años, quien fue asesinado junto a otras siete personas en un ataque armado registrado en la zona comercial conocida como "El Trébol" de los Apaseos.
Ramírez Vázquez había salido de su turno como rescatista en Apaseo el Grande para comprar cervezas y festejar el pase del Cruz Azul a las semifinales del Torneo Apertura 2024. Según narraron sus familiares, era un apasionado aficionado del equipo cementero y un profesional dedicado al servicio de la comunidad.
El ataque
Cerca de las 21:30 horas del 30 de noviembre, un comando armado llegó en un vehículo de lujo a la zona comercial y abrió fuego contra los presentes sin mediar palabra. En el lugar murieron ocho hombres, incluidos Ramírez Vázquez y otro bombero, Alejandro Ortega. También falleció Ricardo Eduardo López Ortega, paramédico del Sistema de Urgencias del Estado de Guanajuato.
Testigos y las autoridades informaron que al menos 20 casquillos percutidos fueron encontrados en el área, mientras las fuerzas de seguridad desplegaron un operativo en la región sin que hasta el momento se hayan registrado detenciones.
Fernando Ulises Ramírez Vázquez: un legado de servicio
Fernando Ulises era hijo de Francisco Ramírez, también rescatista y exmiembro del Cuerpo de Bomberos. Su familia lo describe como un joven entusiasta, comprometido con su trabajo y apasionado por ayudar a los demás. Su muerte ha causado indignación y dolor en la comunidad de Apaseo el Grande, donde compañeros y amigos lo recuerdan con cariño y admiración.
“Lamentablemente nos lo arrebataron cobardemente. Estaba en el lugar y momento equivocados”, comentó Jorge Luis Ramírez, tío del joven.
Violencia imparable en Guanajuato
El ataque en "El Trébol" refleja la grave crisis de violencia que atraviesa Guanajuato, considerado el estado más violento del país con 2,597 homicidios dolosos registrados entre enero y octubre de este año. La gobernadora Libia Dennise condenó los hechos y aseguró que se trabaja en la implementación de una nueva estrategia de seguridad.
Hemos estado trabajando desde anoche ante lo ocurrido en Apaseo el Grande. Un hecho así nos duele y nos compromete a seguir trabajando por la paz de Guanajuato, en esta tarea, las autoridades estamos coordinados y sin descanso. Una condena pública no es suficiente cuando lo que…
— Libia Dennise (@LibiaDennise) December 1, 2024
“Una condena pública no es suficiente cuando lo que queremos es justicia. Seguiremos trabajando para detener a los responsables”, afirmó en un mensaje difundido en redes sociales.
Mientras tanto, la familia de Ulises y las demás víctimas claman por justicia y esperan que estos crímenes no queden impunes. Su historia, como la de muchos otros, evidencia el alto costo humano de la inseguridad que aqueja al país.