General Motors analiza mover producción a EE.UU. por amenaza de aranceles de Trump
La compañía ha emitido también optimismo respecto a una resolución diplomática
General Motors (GM) ha anunciado que podría trasladar parte de su producción de vehículos desde México y Canadá hacia Estados Unidos si el presidente Donald Trump cumple con su amenaza de imponer aranceles de hasta el 25% a las importaciones provenientes de estos países. La medida, que podría entrar en vigor el próximo 1 de febrero, busca presionar a las naciones vecinas para abordar problemas migratorios y el tráfico de fentanilo hacia territorio estadounidense.
GM evalúa alternativas para minimizar el impacto
Mary Barra, presidenta y consejera delegada de GM, explicó durante una conferencia virtual con analistas, realizada para presentar los resultados de la compañía en 2024, que la automotriz cuenta con capacidad instalada en Estados Unidos para absorber parte de la producción que actualmente se realiza en México y Canadá.
“Tenemos capacidad en Estados Unidos para transferir algo de eso. También vendemos camionetas a nivel global, por lo que podemos estudiar el origen de los mercados internacionales. Hay medidas que podemos tomar para minimizar el impacto si se imponen aranceles a Canadá o México”, aseguró Barra.
A pesar de las amenazas arancelarias, la directiva expresó optimismo respecto a una resolución diplomática. Señaló que la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha dado señales de estar trabajando en medidas para evitar estas sanciones comerciales.
Aranceles como herramienta política
Desde su llegada al poder, Trump ha utilizado los aranceles como una estrategia para presionar a sus socios comerciales. El mandatario estadounidense afirmó que impondría estas tarifas si México y Canadá no tomaban acciones concretas para detener el flujo migratorio y el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos.
Un alto funcionario de la administración estadounidense, citado por el Wall Street Journal, señaló que Trump está decidido a imponer los aranceles antes del cierre de enero si no se cumplen sus demandas. Este enfoque de “aranceles primero, negociar después” ha demostrado ser efectivo en otros casos, como con Colombia, donde la imposición de un arancel similar logró que el gobierno de Gustavo Petro aceptara la recepción de migrantes deportados por Estados Unidos.
Impacto potencial para México y Canadá
De implementarse, los aranceles podrían afectar gravemente a las economías de México y Canadá, ya que ambos países son destinos clave para la producción automotriz destinada al mercado estadounidense. En el caso de GM, la decisión de trasladar operaciones podría significar pérdidas de empleo y una menor inversión en plantas ubicadas en ambos países.
El gobierno mexicano no ha emitido declaraciones oficiales sobre la posibilidad de los aranceles, pero la situación pone en riesgo no solo la relación comercial entre ambos países, sino también la estabilidad de la industria automotriz en la región.
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