Alcalde de Minneapolis no apoyará a autoridades migratorias para deportar indocumentados

Héctor Velázquez 29 enero, 2025

Jacob Frey aseguró que su estado procura los derechos de los inmigrantes y reiteró su disposición a ayudar

 ©X/MailOnline - Jacob Frey, alcalde de Minneapolis.

El alcalde de Minneapolis, Jacob Frey, dio a conocer a través de un evento que no cooperará con las autoridades del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) para deportar a los migrantes ilegales que se encuentran en EE.UU.

Quiero hablar directamente a la gente indocumentada, los amamos. Nos importan. En la ciudad de Minneapolis los apoyaremos y haremos cualquier cosa para ayudar, porque no son extranjeros en nuestra ciudad, son vecinos”, declaró el político.

Frey indicó que en su estado existe la ordenanza de separación, la cual impide que las autoridades locales colaboren con el ICE, limitando el acceso a la información sobre la documentación de los residentes.

Además, subrayó que la ciudad no hace preguntas sobre el estatus migratorio, por lo que no tiene información sobre quién está documentado o no.

No hacemos la pregunta con respecto al estatus migratorio y, porque no hemos hecho la pregunta, no tenemos datos que muestren el estado de la documentación en nuestra ciudad”, aseguró el político.

Finalmente, el alcalde concluyó que los agentes de policía locales no cooperarán con la aplicación de la Ley Federal de Inmigración y que la ciudad se enfocará en hacer cumplir las leyes locales y estatales.

Se veta proyecto migratorio en Florida

Mientras tanto, en Florida, el gobernador Ron DeSantis anunció que vetará el proyecto migratorio aprobado en el Legislativo estatal, el cual considera "débil" y alejado de sus propuestas originales.

El texto, aprobado en el Capitolio de Tallahassee, retira al gobernador la potestad de supervisar las políticas migratorias y la otorga al comisionado de Agricultura, Wilton Simpson.

Uno de los puntos que DeSantis propuso y fue excluido era la imposición de cargos criminales a agentes del orden que no cumplan con sus responsabilidades en materia migratoria.

Además, el proyecto aprobado elimina las matrículas estatales para inmigrantes indocumentados en universidades públicas, una medida que afectaría a más de 40.000 estudiantes y que fue rechazada por organizaciones civiles.

La confrontación entre DeSantis y los legisladores republicanos refleja la creciente tensión dentro del partido en Florida. El lunes, el gobernador convocó una sesión extraordinaria para discutir este y otros temas, pero los legisladores la finalizaron abruptamente, dando inicio a su propia sesión, en un revés político para el exaspirante presidencial.

Semanas atrás, antes de que Donald Trump asumiera su segundo mandato, DeSantis había impulsado una sesión especial con la intención de que Florida liderara el programa de deportaciones masivas prometido por el republicano. Sin embargo, con el nuevo rumbo tomado por el Legislativo estatal, sus planes parecen haberse frustrado.

Finalmente, el alcalde de Minneapolis reiteró que los agentes de policía locales no cooperarán con la aplicación de la Ley Federal de Inmigración y que la ciudad se enfocará en hacer cumplir las leyes locales y estatales.

Con información de EFE.