¿Aliados o enemigos? Trump califica a México como “país muy peligroso controlado por el narco”

El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, realizó duras declaraciones contra México, calificándolo como un país “muy peligroso” y bajo el control de los cárteles de la droga. En una rueda de prensa celebrada en su finca Mar-a-Lago, al día siguiente de la certificación de su triunfo electoral por parte del Congreso de Estados Unidos, Trump subrayó los problemas de violencia vinculados a las bandas narcotraficantes y destacó la creciente preocupación por la seguridad y el comercio entre ambas naciones.

En sus comentarios, Trump señaló que México se encontraba “esencialmente dirigido por los cárteles” y advirtió que Estados Unidos no podría permitir que esta situación continuara. “México está realmente en problemas, muchos problemas, es un lugar muy peligroso”, dijo el futuro mandatario. La violencia vinculada a los narcotraficantes, que ha sido un tema central en la política de seguridad de ambos países, fue uno de los puntos más destacados de su discurso.

Trump también criticó el manejo del gobierno mexicano frente al narcotráfico y acusó a las autoridades de no hacer lo suficiente para evitar el cruce de drogas hacia Estados Unidos. "No podemos seguir permitiendo que las drogas lleguen en cantidades récord", insistió, haciendo énfasis en la necesidad de que México actúe con mayor firmeza para frenar el flujo de sustancias ilícitas.

Guerra comercial y flujo migratorio

El futuro presidente no solo se refirió a la violencia, sino también a las cuestiones comerciales y migratorias. En su conferencia de prensa, Trump destacó el déficit comercial entre Estados Unidos y México, acusando a México de aprovecharse económicamente del país vecino. En este contexto, el presidente electo reiteró su intención de imponer aranceles severos tanto a México como a Canadá, mencionando que las drogas que cruzan la frontera también llegan a través del país vecino del norte.

Sobre la cuestión migratoria, Trump volvió a exigir que México detuviera el flujo de personas hacia Estados Unidos. "México tiene que dejar de permitir que millones de personas ingresen a nuestro país. Pueden detenerlos", dijo, haciendo referencia a los miles de migrantes que cruzan la frontera en busca de mejores oportunidades.

Renombrar el Golfo de México

Uno de los momentos más controvertidos de la rueda de prensa fue la propuesta de Trump de cambiar el nombre del Golfo de México por el de "Golfo de América". El presidente electo expresó: "Vamos a cambiar el nombre del Golfo de México a Golfo de América. El Golfo de América, qué hermoso nombre". Aunque esta idea no ha sido ampliamente comentada en foros políticos, demuestra el enfoque un tanto provocador y desafiante que ha caracterizado su discurso en relación a México y otros temas internacionales.

Un llamado a la acción

Trump dejó claro que, bajo su administración, habrá un enfoque más firme hacia México. A pesar de sus críticas, insistió en que lo más importante para Estados Unidos es resolver estos problemas que, según él, han sido ignorados durante mucho tiempo. "Estamos haciendo la mayor parte del trabajo, y vamos a cambiar las cosas", afirmó.

Estas declaraciones siguen la línea de su campaña presidencial, que se centró en la construcción de un muro fronterizo, el control del narcotráfico y la renegociación de acuerdos comerciales como el T-MEC.

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