"Es terrible": Trump admite crisis humanitaria en Gaza, pero esquiva llamarlo genocidio
Las familias en Palestina intentan acallar el hambre tomando agua con sal

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, calificó este jueves la situación en la Franja de Gaza como "terrible", pero evitó responder a la pregunta de la prensa sobre si considera que se está perpetrando un genocidio por parte de Israel.
"Es terrible lo que está sucediendo allí. La gente está muy hambrienta", dijo Trump desde la Casa Blanca cuando se le preguntó si coincidía con las declaraciones de la legisladora ultraconservadora Marjorie Taylor Greene, quien acusa a Israel de cometer un genocidio contra la población palestina.
Apoyo a polémico fondo humanitario
El mandatario reiteró su respaldo a la controvertida entidad privada Gaza Humanitarian Fund (GHF), encargada de distribuir ayuda humanitaria en el enclave palestino bajo un acuerdo entre EE.UU. e Israel.
Trump pidió a Israel facilitar la entrega de alimentos, aunque también acusó a Hamás de "robar la comida", a pesar de que no existen pruebas contundentes de estos robos, según reportes de medios estadounidenses.
"Dimos 60 millones de dólares para comida y es una vergüenza porque no hemos visto los resultados. Queremos que Israel lo vigile. Parte del problema es que Hamás se está robando la comida", declaró.
Organizaciones denuncian sistema "mortal"
Más de 2.000 organizaciones de derechos humanos, incluyendo Médicos Sin Fronteras, han denunciado que el actual sistema de distribución de ayuda en Gaza es "mortal".
Según el Ministerio de Salud palestino, más de 1.000 personas han sido asesinadas por las fuerzas israelíes cuando intentaban acceder a ayuda humanitaria, muchas de ellas cerca de los centros de distribución del GHF.
Crisis humanitaria sin precedentes
La Franja de Gaza enfrenta uno de sus peores momentos humanitarios debido al bloqueo israelí que impide la entrada de alimentos, agua, medicamentos y combustible. Esta situación ha provocado muertes por hambre, desmayos y un incremento alarmante en los casos de desnutrición severa.
Médicos en Gaza afirman que muchas familias intentan calmar el hambre de sus hijos con agua con sal.
Además de Taylor Greene, otros políticos y figuras ultraconservadoras estadounidenses como Thomas Massie, Steve Bannon y el excongresista Matt Gaetz, han cuestionado la actuación de Israel en Gaza y han señalado que podría tratarse de crímenes contra la humanidad.