La venganza de Trump: adversarios se preparan para huir de Estados Unidos

A dos meses del inicio de la segunda administración de Donald Trump, varios exfuncionarios estadounidenses y críticos del expresidente están tomando medidas extraordinarias para protegerse. Así lo develó una investigación del diario The Washington Post. Desde tramitar la ciudadanía extranjera hasta preparar "go bags" con efectivo y documentos de emergencia, pues temen represalias bajo el retorno de Trump al poder.

Desde su derrota en 2020, Trump ha reiterado que buscaría venganza contra quienes percibe como miembros del “Estado profundo” o enemigos políticos. Sus palabras se intensificaron durante su campaña de reelección, donde prometió “hacer que Estados Unidos vuelva a ser grandioso” y describió a sus oponentes como el “enemigo desde dentro”.

Un exoficial retirado del ejército de EE.UU., que alguna vez chocó con la administración de Trump, intentó obtener ciudadanía italiana, pero al no ser elegible, preparó una mochila de emergencia en caso de tener que huir del país. Otros exfuncionarios buscan la ciudadanía en Europa, inquietos ante la posibilidad de persecuciones políticas.

Mark Zaid, abogado de seguridad nacional, comentó al diario estadounidense que estas medidas no son exageradas. “La administración entrante ha prometido acciones rápidas desde el Día 1, así que no tomará mucho tiempo para que se revele el alcance de sus planes”, dijo Zaid.

EXFUNCIONARIOS TEMEN REPRESALIAS DE DONALD TRUMP

Algunos críticos mencionan el temor de que sus vidas y carreras se vean afectadas, ya sea a través de la pérdida de sus credenciales de seguridad —valiosas en el sector privado— o mediante auditorías fiscales exhaustivas. Estas tácticas, argumentan, podrían ser usadas para intimidar o desgastar a opositores sin la necesidad de presentar cargos formales.

Kash Patel, aliado de Trump y autor de un libro en el que enumera a presuntos enemigos del “Estado profundo”, ha generado listas de personas que podrían ser objetivos del nuevo gobierno. Además, ciertos activistas pro-Trump compilan listas específicas de funcionarios y exfuncionarios que podrían enfrentar represalias. La existencia de tales listas ha llevado a varios críticos de Trump a evaluar opciones de seguridad.

Los anuncios de Trump sobre designaciones claves en su posible administración han generado nerviosismo. La reciente selección de Matt Gaetz como fiscal general y de Tulsi Gabbard como directora de inteligencia nacional, cargos con acceso a vastos recursos gubernamentales, despierta temores sobre el uso de estas herramientas contra adversarios políticos.

Quienes enfrentan esta situación son exfuncionarios con décadas de experiencia en seguridad nacional, y ahora deben prepararse ante un riesgo inusual: posibles represalias desde su propio gobierno. Un exfuncionario de seguridad comentó a los periodistas Isaac Stanley-Beckery Ellen Nakashima: “Nosotros gestionamos riesgos de vida o muerte, pero ahora tememos por la integridad de nuestras familias”. Varios creen que Trump podría emplear medidas para criminalizar la disidencia.

A medida que se acerca la inauguración presidencial en enero, los críticos de Trump monitorean de cerca los nombramientos de su gabinete y consideran opciones para protegerse. Las acciones de estos individuos reflejan una inquietud creciente sobre el futuro de la democracia en EE.UU. y los límites de la persecución política en el país.

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