Notre Dame reabre sus puertas: el renacer del ícono gótico tras cinco años de reconstrucción
Miles de personas, incluidos cerca de 40 jefes de Estado y Gobierno, asistirán a la ceremonia que marca el renacimiento del monumento
La emblemática catedral de Notre Dame en París, una de las joyas del arte gótico y símbolo cultural de Francia, reabre hoy sus puertas tras cinco años de intensos trabajos de reconstrucción. Este sábado, miles de personas, incluidos cerca de 40 jefes de Estado y Gobierno, asistirán a la ceremonia que marca el renacimiento del monumento, cuyo incendio en 2018 dejó huella en la historia reciente.
Con una inversión cercana a los 700 millones de euros y la participación de más de 2.000 trabajadores, el templo medieval ha sido restaurado a su antiguo esplendor. Entre los asistentes destacados estarán el presidente francés Emmanuel Macron, quien convirtió su reconstrucción en una prioridad personal, y el arzobispo de París, Laurent Ulrich, quien presidirá la ceremonia.
Una reconstrucción histórica
El incendio del 15 de abril de 2018 destruyó gran parte del tejado y la aguja central, diseñada por el arquitecto Eugène-Emmanuel Viollet-le-Duc en el siglo XIX. Las imágenes del desastre recorrieron el mundo, generando una movilización internacional que recaudó 840 millones de euros en donaciones provenientes de más de 150 países.
El proceso de restauración combinó técnicas medievales con herramientas modernas como drones y escáneres. Artesanos, arqueólogos, ingenieros y científicos trabajaron juntos para devolver la vida a la catedral, con logros notables como la reconstrucción de su techo, la restauración de sus campanas y la limpieza de su icónico órgano de 8.000 tubos.
Un legado de resiliencia
Notre Dame no solo es un monumento religioso, sino un testigo de la historia de Francia. Desde su construcción en 1163 hasta su papel en momentos clave como la coronación de Napoleón o su rescate tras la Revolución francesa, la catedral ha sido un símbolo de poder, fe y cultura.
La novela Nuestra Señora de París de Victor Hugo jugó un papel crucial en su preservación, destacando su deterioro en el siglo XIX y promoviendo una restauración que duró más de 20 años. Hoy, más de 800 años después de que se colocara su primera piedra, Notre Dame renace como un testimonio de la capacidad humana para preservar el patrimonio frente a la adversidad.
Un futuro lleno de vida
Antes del incendio, Notre Dame recibía 12 millones de visitantes anualmente, superando a monumentos como la Torre Eiffel y el Louvre. Su reapertura promete devolver a París un imán cultural que atrae a turistas y fieles de todo el mundo.
Mañana, tras la ceremonia de reapertura, se celebrará una misa en la que participarán 170 obispos y párrocos. Las actividades ya han generado gran expectación, con entradas agotadas para las primeras visitas.
Notre Dame, renacida de las cenizas, vuelve a ser un faro del arte y la espiritualidad, lista para seguir inspirando a generaciones futuras.