Ejército activa el Plan DN-III-E en Edomex tras intensas lluvias e inundaciones
Crece la tensión entre ciudadanos y autoridades por la lentitud en la atención de emergencias
Las intensas lluvias que azotaron al Estado de México en los últimos días provocaron graves inundaciones en municipios como Toluca, Metepec, Lerma, San Mateo Atenco, Ecatepec y Chalco, lo que obligó a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a activar el Plan DN-III-E para asistir a la población.
Tensión social por respuesta tardía
Vecinos de algunas colonias afectadas como Los Presidentes en Chicoloapan, así como habitantes de San Mateo Atenco, manifestaron su molestia por la tardanza de las autoridades locales en desplegar personal de emergencia. Algunos reportaron enfrentamientos verbales con funcionarios municipales que acudieron horas después del desastre.
En redes sociales circularon videos donde se observa a pobladores recriminando la falta de apoyo inmediato, mientras elementos del Ejército ingresaban con bombas y maquinaria para desalojar el agua.
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Despliegue militar y operativo hidráulico
La Sedena movilizó unidades terrestres del Ejército Mexicano para realizar labores de bombeo, limpieza y rescate, principalmente en el Valle de Toluca y la Zona Oriente. Paralelamente, la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM) desplegó a más de 200 elementos del Grupo Tláloc y activó 58 equipos de atención de emergencia.
Se habilitó un centro de mando en el C4 de San Mateo Atenco para coordinar esfuerzos entre los tres niveles de gobierno.
Monitoreo aéreo y puntos críticos
El Grupo Relámpagos, especializado en emergencias aéreas, realizó sobrevuelos de reconocimiento en Toluca, Zinacantepec, Ocoyoacac y Metepec para detectar zonas de alto riesgo. En Los Reyes La Paz, brigadas de emergencia trabajaron en la clínica 53 del IMSS, cuya operación fue interrumpida por el agua acumulada.
Ecatepec y Chalco, bajo vigilancia
En Chalco, una de las zonas más golpeadas, se utilizaron bombas tipo Thompson para drenar el agua. En Ecatepec, se mantiene un monitoreo constante del Gran Canal para evitar desbordamientos, que podrían afectar a miles de familias.
Mientras tanto, en Tenancingo, personal técnico realizó la limpieza de rejillas en el Hospital General, donde las lluvias amenazaban con colapsar parte del sistema sanitario.
Las autoridades estatales aseguraron que habrá apoyo económico y material para las familias afectadas, aunque aún no se ha detallado el número total de damnificados ni las viviendas afectadas. Organismos como Protección Civilcontinúan con los censos.
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