Así murió Ryan Easley, de "Tiger King", por un tigre frente a su esposa e hija en Oklahoma
Del éxito en Netflix a una tragedia real: muere domador de "Tiger King", Ryan Easley, atacado por su tigre
Un espectáculo de grandes felinos en la reserva Growler Pines, cerca de Hugo, Oklahoma, terminó en tragedia el 20 de septiembre de 2025. Un tigre atacó y mató a su cuidador, Ryan Easley, de 37 años, mientras su esposa y su hija pequeña presenciaban horrorizadas la escena.
El ataque frente al público
Según el sheriff del condado de Choctaw, Terry Park, Easley realizaba una demostración dentro de una jaula cuando el tigre, descrito como “enorme”, lo mordió repentinamente y comenzó a sacudirlo con violencia.
La agresión ocurrió al final del espectáculo, frente a varios espectadores. Cuando los agentes llegaron tras la llamada de emergencia, Easley ya no respiraba. Su esposa y su hija habían sido testigos directos de la tragedia.
“Era un tigre enorme”, dijo Park a Associated Press. “Este ejemplar lo tenía desde hacía bastante tiempo”.
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¿Quién era Ryan Easley?
Easley no era un desconocido para el público. Formó parte del círculo de cuidadores de Joe Exotic, protagonista de la serie documental de Netflix Tiger King: Murder, Mayhem and Madness (2020).
Documentos de 2012 muestran que dos de los tigres de Easley provenían del Greater Wynnewood Exotic Animal Park, propiedad de Joe Exotic. Incluso el propio Maldonado-Passage (nombre real de Exotic), actualmente en prisión, publicó un mensaje de despedida:
El mensaje de Growler Pines
Tras el ataque, la reserva Growler Pines Tiger Preserve confirmó la muerte del cuidador en un emotivo comunicado publicado en su página de Facebook:
“Ryan era un apasionado defensor de la conservación de la vida silvestre. Su amor por los animales, especialmente los grandes felinos, era evidente en todos los aspectos de su vida. Comprendía los riesgos, no por imprudencia, sino por amor. Para él, los tigres no eran solo animales, sino seres con los que forjó un vínculo de respeto y cuidado”.
La reserva anunció la cancelación inmediata de todos los espectáculos y tours, sin fecha de reapertura, mientras continúan las investigaciones.
Críticas de organizaciones animalistas
El caso ha encendido el debate sobre la seguridad y la ética de los espectáculos con animales salvajes.
La organización PETA declaró que la muerte de Easley “era solo cuestión de tiempo”, señalando que los tigres responden de forma natural con agresión ante situaciones de estrés.
Por su parte, Humane World for Animals calificó el hecho como un “triste recordatorio de los riesgos de mantener tigres y otros grandes felinos en cautiverio para entretenimiento humano”.
No es un caso aislado
La muerte de Ryan Easley recuerda otros ataques protagonizados por tigres en espectáculos:
En 1997, un tigre de Bengala mató a su entrenador frente a 200 personas en un circo de Pensilvania.
En 2003, Roy Horn, del famoso dúo Siegfried & Roy en Las Vegas, quedó gravemente herido cuando un tigre blanco lo atacó durante una función.
Estos casos han reforzado las voces que exigen prohibir la exhibición de grandes felinos en circos y espectáculos privados.
Una tragedia con impacto global
La conmoción por la muerte de Easley se extiende más allá de Oklahoma. Excompañeros lo recuerdan como un cuidador entregado y un “apasionado defensor de los tigres”.
Mientras tanto, se han recaudado más de 31 mil dólares en GoFundMe para apoyar a su esposa e hija tras la tragedia.
Las autoridades federales y locales continúan investigando el ataque, pero las circunstancias exactas —cómo y por qué el tigre reaccionó de esa manera— siguen sin esclarecerse.
Lo cierto es que el nombre de Ryan Easley, alguna vez vinculado a la fama de Tiger King, hoy queda marcado por una de las tragedias más impactantes en la historia reciente de los espectáculos con animales salvajes en Estados Unidos.
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