La hija de 12 años de Carla Bañuelos lo vio todo: Así vivió el feminicidio de su madre en Guadalajara
¿Por qué nadie habla del feminicidio de Carla? El miedo de los vecinos y el horror de su hija

Carla Bañuelos, joven de 28 años, fue asesinada en Guadalajara con un fusil AR-15. El feminicidio, ocurrido el pasado 12 de julio frente a su domicilio en la colonia Balcones de Oblatos, fue presenciado por su hija de 12 años, según relataron testimonios.
Carla no tenía relación sentimental con su agresor
Contrario a lo que circuló en redes sociales tras la viralización del video del feminicidio, la Fiscalía de Jalisco confirmó que el agresor no era pareja sentimental de Carla. Se conocían, pero no tenían una relación. “Él quería estar con ella, pero Carla lo rechazaba. Sabía que era peligroso”, relataron sus amigas.
La familia ha pedido detener la revictimización de Carla en redes sociales, donde usuarios han llegado a culparla por presuntamente haber golpeado la camioneta del atacante. “La mataron con un fusil. ¿Y aún así cuestionan a la víctima?”, cuestionó una de sus amigas. Exigen que las publicaciones de odio cesen y que el foco se mantenga en el verdadero responsable.
El crimen: seis disparos y una niña testigo
El asesinato ocurrió cerca de las 2:30 de la madrugada del sábado 12 de julio. Las cámaras de seguridad captaron el momento en que un hombre armado, identificado como "Kevin", se acerca a Carla, que conversaba con amigos. Tras una breve discusión, el sujeto le disparó a quemarropa con un AR-15.
En el video se observa a tres mujeres y un hombre aterrorizados junto al cuerpo de Carla. También estaba su hija, quien presenció todo en silencio. “La niña no gritó. No corrió. Solo se quedó ahí, congelada”, relató un testigo.
Rafael, el padre de Carla, relató que estaba descansando cuando escuchó las detonaciones. “Bajé corriendo, pero ya no pude hacer nada. La vi ahí, sin vida. Eso no se olvida nunca”, dijo en entrevista. Confirmó también que su hija fue sepultada el 14 de julio. “La velamos ayer. Ahora nos toca cuidar a su hija”.
▶️ La hija de 12 años de Carla presenció el asesinato de su madre a punto de fusil en Guadalajara; los vecinos de la víctima aseguran que el agresor “es una lacra”. La Fiscalía de Jalisco ya ubicó el auto del presunto feminicida
— Milenio Televisión (@mileniotv) July 15, 2025
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La Fiscalía ya identificó al feminicida
La Fiscalía del Estado de Jalisco abrió una carpeta de investigación bajo el protocolo de feminicidio. El agresor, "Kevin", ya fue identificado, se emitió una orden de aprehensión y fue localizada la camioneta en la que huyó tras cometer el crimen. También se investiga la procedencia del arma de alto calibre que utilizó. El gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, afirmó que están “muy cerca” de capturarlo, aunque no dio más detalles.
La Fiscalía también aclaró que el fusil AR-15 “no es un arma que cualquiera tenga”, y que se están explorando posibles nexos con el crimen organizado. Se investiga además si hubo omisiones previas que pudieron haber evitado el crimen.
Esta y otras evidencias son fundamentales en la búsqueda y captura del presunto responsable. Conoce los detalles 📷 https://t.co/VYtFo79VSP. (2-2)
— Fiscalía del Estado de Jalisco (@FiscaliaJal) July 14, 2025
La menor quedó huérfana y traumatizada:
La escena fue devastadora. Según testigos, Carla discutía con un hombre identificado como su agresor, cuando él le disparó al menos seis veces en la cabeza y el pecho. Todo ocurrió frente a su hija, una niña que ahora carga con el trauma de haber visto a su madre ser asesinada brutalmente en la calle donde vivían.
La menor ha quedado al resguardo de la familia materna, mientras recibe atención psicológica especializada. “Tiene 12 años y entiende perfectamente lo que pasó. Pero está en shock, paralizada por el dolor”, narraron allegados a la familia. Rafael, padre de Carla, confirmó que su nieta será prioridad: “Tiene una hija menor, hay que sacarla adelante, no queda otra”.
Vecinos temen hablar: “Sabemos que el agresor es peligroso”
El miedo también se apoderó del entorno. En la colonia Balcones de Oblatos, donde ocurrió el crimen, los vecinos prefieren guardar silencio. Algunos afirman que el agresor tiene vínculos con el crimen organizado y que su familia también estaría relacionada con actividades delictivas. “Es una lacra. Sabemos quién es, pero nadie quiere hablar mientras no lo atrapen”, confesó un habitante bajo anonimato.
Esa atmósfera de miedo ha impedido que se compartan más testimonios o pruebas. La comunidad, paralizada por la violencia y la amenaza latente, exige justicia, pero también protección.
Justicia y reparación: una familia rota exige respuestas
La familia de Carla, devastada, exige justicia plena y medidas reales para que casos como este no se repitan. El padre de la víctima lo resumió así: “Perder a una hija no tiene nombre. Ahora solo quiero que ese hombre pague, y que a mi nieta no le falte nunca nada”.
Mientras la hija de Carla enfrenta el impacto psicológico del feminicidio, su entorno vive con miedo, pero también con la firme esperanza de que este caso no quede impune.
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