¿Por qué Dámaso López Serrano, "El Mini-Lic” sería uno de los principales enemigos del Cártel de Sinaloa?
Tras su reciente captura, Dámaso López Serrano podría jugar un papel clave en la lucha contra el crimen organizado
Dámaso López Serrano, alias “El Mini-Lic”, fue detenido el pasado 12 de diciembre en Virginia, Estados Unidos, acusado de tráfico de fentanilo. Su captura ocurre después de haber obtenido libertad condicional en 2022, tras colaborar en el juicio contra Joaquín “El Chapo” Guzmán.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, calificó su detención como “muy importante”, aunque destacó que los detalles serían proporcionados por el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch.
El arresto del hijo de Dámaso López Núñez, quien fue mano derecha de El Chapo, podría representar un grave riesgo para el Cártel de Sinaloa, una organización actualmente dividida en dos facciones: una leal a Ismael “El Mayo” Zambada y otra dirigida por los hijos de Guzmán Loera, conocidos como “Los Chapitos”.
Rivalidad con Los Chapitos
El Mini-Lic, heredero de Dámaso López Núñez ("El Licenciado"), fue en su momento un aliado cercano de la familia Guzmán. Sin embargo, tras la última captura de El Chapo, surgieron tensiones internas en el cártel.
Según información de Anabel Hernández, los hijos de "El Chapo" acusaron al Mini-Lic de intentar emboscar a Ismael "El Mayo" Zambada. Aunque López Serrano negó dicha acusación en entrevista con la periodista, las tensiones escalaron.
En un episodio crítico, el Mini-Lic atentó contra la vida de Iván Archivaldo y Ovidio Guzmán en la plaza Royal, en Culiacán, Sinaloa. Sin embargo, fue disuadido por su padre, quien confiaba en llegar a un acuerdo pacífico con Los Chapitos.
Su entrega y colaboración con EE.UU.
En 2017, Dámaso López Serrano se entregó a las autoridades de Estados Unidos con el objetivo de negociar beneficios legales. Siguiendo los consejos de su padre, el Mini-Lic aceptó su culpabilidad en el tráfico de cocaína, metanfetamina y heroína.
Durante su colaboración, también vinculó a los líderes del Cártel de Sinaloa con el gobierno de Enrique Peña Nieto, asegurando que el cártel apoyó su campaña presidencial. Esta cooperación le permitió obtener una condena reducida, cumpliendo solo seis años en prisión antes de obtener libertad condicional en 2022.
Una estrategia de inteligencia
De acuerdo con Infobae México, analistas sugieren que el reciente arresto de López Serrano podría ser parte de una estrategia conjunta entre las autoridades estadounidenses y el exnarcotraficante para obtener información sobre la estructura actual del Cártel de Sinaloa, especialmente sobre Los Chapitos.
Un riesgo para el Cártel de Sinaloa
La nueva detención de López Serrano representa una ventaja estratégica para las autoridades en su intento de desmantelar al Cártel de Sinaloa. Su conocimiento de las operaciones y las disputas internas lo convierte en una amenaza directa para la organización, en particular para Los Chapitos, quienes ya enfrentan presiones de agencias internacionales.
El Mini-Lic podría ser pieza clave en el avance de las investigaciones y en la lucha contra el tráfico de fentanilo, afectando significativamente a una de las organizaciones criminales más poderosas de México.