Tren Interoceánico: las millonarias irregularidades que la ASF detectó en la línea Z donde ocurrió el accidente que deja 13 muertos
La ASF detecta millonarias irregularidades en la Línea Z del Tren Interoceánico, donde se descarriló el transporte de pasajeros que dejó 13 muertos
Luego del descarrilamiento del Tren Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, que dejó un saldo de 13 muertos y más de 100 heridos, resurge la información sobre las irregularidades que detectó la Auditoría Superior de la Federación (ASF) en el plan de rehabilitación de la Línea Z, justo donde ocurrió el accidente el domingo 28 de diciembre.
De acuerdo a la Secretaría de Marina (Semar), el descarrilamiento se registró a la altura de Nizanda, en el estado de Oaxaca. El Tren Interoceánico cubría la ruta Salina Cruz-Coatzacoalcos.
El secretario de Marina, Raymundo Pedro Morales dijo que la Fisscalía General de la República (FGR) en coordinación con la fiscalía de Oaxaca investiga los hechos para determinar la causa del descarrilamiento.
Anteriormente, la ASF reveló graves irregularidades financieras en el proyecto de rehabilitación de la Línea Z del Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec (FIT), que desde su inicio en 2020, ha generado controversia por su impacto en la Hacienda Pública Federal.
Irregularidades millonarias en el Tren Interoceánico
Y es que el informe de la Cuenta Pública 2020, el cual analizó los avances en la rehabilitación de la Línea Z, detalló un daño económico de 33 millones 585 mil 934 pesos por diversas irregularidades, como pagos por obras no realizadas, costos inflados y el uso de materiales de mala calidad, de acuerdo con lo publicado por el sitio Eme Equis.
Entre los hallazgos más graves, la ASF destaca el caso de los "letreros normativos de obra", cuyo valor fue de 418 mil 800 pesos y cuya existencia no pudo ser comprobada debido a la falta de evidencia.
Además, en el tramo La Mata-Colonia Jordán, se identificaron pagos excesivos de 279 mil pesos por el suministro de balasto, un material esencial para la infraestructura ferroviaria, cuyo volumen real de colocación fue menor al reportado.
Sobrecosto de rieles
A esto se suman otros problemas, como anticipos millonarios entregados sin que los trabajos fueran iniciados, y un sobrecosto significativo en la compra de rieles, donde se pagaron más de 4 millones de pesos por rieles de mayor peso del que realmente se instaló.
Mientras que en el informe de la Cuenta Pública 2023, la ASF detectó más irregularidades, entre ellas el caso del contrato FIT-GARMOP-OP-Z-13-2022, donde se identificaron posibles daños por 17.6 millones de pesos debido a la inflación de costos de mano de obra y equipo.
Los auditores hallaron que se cobraron cuadrillas de personal y maquinaria que no fueron registradas ni en los informes fotográficos ni en los reportes de supervisión, lo que plantea serias dudas sobre la ejecución de los trabajos.
Además, se hallaron pagos excesivos por el suministro de balasto y el desmantelamiento de vías que no fueron respaldados por pruebas tangibles.
Desvíos millonarios
La ASF también identificó otro contrato, el FIT-GARMOP-OP-Z-14-2019, en el cual se detectaron pagos de 2.6 millones de pesos por rieles de mayor peso y costo que los realmente instalados. A pesar de que la entidad fiscalizada alegó un "error mecanográfico", la auditoría no encontró justificación para las diferencias de costos. Además, se descubrieron otros 8.5 millones de pesos en pagos adicionales por duplicidad de insumos y cobro por servicios no previstos en los contratos originales.
Hasta la fecha, las autoridades han logrado recuperar solo una pequeña parte de los recursos mal pagados: 129.3 mil pesos por cobros indebidos en pruebas de laboratorio. El resto de los fondos aún sigue bajo investigación, a la espera de que los responsables rindan cuentas.
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