Christopher Reeve: la trágica historia del Superman que inspiró al mundo
Reeve saltó a la fama mundial con Superman: The Movie, pero un accidente lo cambió todo

Christopher Reeve es recordado por millones como el Superman definitivo, pero su historia real va mucho más allá de la capa y la “S” en el pecho. Nació en Nueva York el 25 de septiembre de 1952. Desde joven mostró pasión por la actuación, debutando en Broadway y formándose en la prestigiosa Juilliard School, donde compartió clases con Robin Williams, quien sería su amigo incondicional.
En 1978, Reeve saltó a la fama mundial con Superman: The Movie, encarnando al héroe de DC Comics con carisma, altura imponente y una humanidad que conectó con toda una generación. A lo largo de una década protagonizó tres secuelas que consolidaron su figura como ícono de la cultura pop.
Pero su vida cambió drásticamente el 27 de mayo de 1995. A los 42 años, participaba en un concurso ecuestre en Virginia cuando su caballo se detuvo bruscamente ante un obstáculo. Reeve salió despedido y cayó de cabeza, fracturándose dos vértebras cervicales. El diagnóstico fue devastador: tetraplejia, sin movilidad del cuello hacia abajo.
El héroe verdadero
En un inicio, Reeve cayó en la desesperanza. Contó en entrevistas que pensó en pedirle a su esposa, Dana, que le ayudara a morir. Ella respondió con una frase que lo sostuvo: “Sigues siendo tú y te amaré siempre”. Con esas palabras, Reeve decidió dar un giro a su tragedia.
Desde su silla de ruedas, se convirtió en uno de los principales activistas por la investigación de lesiones de médula espinal y el uso de células madre. Fundó la Christopher & Dana Reeve Foundation, que sigue vigente impulsando avances médicos y apoyando a pacientes con discapacidad.
Además, Reeve volvió a actuar y dirigir, dando conferencias motivacionales y escribiendo su autobiografía, Still Me, donde relató su batalla con honestidad y sin autocompasión. Su esposa, Dana Reeve, se convirtió en su mayor soporte hasta su muerte en 2006, dos años después del fallecimiento de Christopher, ocurrido el 10 de octubre de 2004, a los 52 años.
La historia de Reeve trasciende la pantalla. Fue un superhéroe de carne y hueso que usó su voz y su experiencia para inspirar a millones, recordando al mundo que la verdadera fuerza está en la voluntad de seguir adelante, incluso cuando el cuerpo ya no responde.
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