'El Jardinero', nuevo jefe de seguridad de Los Chapitos por el que la DEA ofrece millonaria recompensa
La DEA ofrece 5 MDD por “El Jardinero”, operador clave de Los Chapitos y símbolo de la nueva alianza entre el Cártel de Sinaloa y el CJNG
La Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) activó una alerta internacional para capturar a Audias Flores Silva, alias “El Jardinero”, actual jefe de seguridad de Los Chapitos, la facción del Cártel de Sinaloa liderada por los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán. La agencia estadounidense ofrece una recompensa de hasta cinco millones de dólares por información que conduzca a su detención.
Tras la captura de Jorge Humberto Figueroa Benítez, alias “El Perris”, antiguo jefe de seguridad de la organización, Flores Silva fue designado como su reemplazo. De acuerdo con el periodista especializado en seguridad Óscar Balderas, el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) ofreció a uno de sus operadores más experimentados para ocupar ese puesto clave. Así nació una alianza inédita entre dos de los grupos criminales más poderosos de México.
Giro en el equilibrio criminal
El nombramiento de Flores Silva marca un punto de inflexión en la dinámica del narcotráfico en México. Conocido por su eficacia, discreción y brutalidad, “El Jardinero” es considerado un operador clave en la nueva arquitectura criminal. La alianza entre Los Chapitos y el CJNG, motivada por tácticas de supervivencia y reorganización interna, sugiere que las fracturas entre cárteles no son definitivas.
Uno de los factores que habría precipitado esta colaboración fue el asesinato de Jesús Miguel Flores Silva, hermano del capo, ocurrido en noviembre de 2022 en Mazatlán. La autoría se atribuye a sicarios ligados a Ismael “El Mayito Flaco” Zambada, lo que habría motivado a Audias Flores a romper con sus antiguos aliados y unirse estratégicamente al bando de los hijos de “El Chapo”.
El historial criminal de “El Jardinero” se remonta al menos a 2015, cuando fue identificado como responsable de una emboscada contra policías estatales en Jalisco que dejó 15 agentes muertos. Fue detenido en 2016 y liberado en 2019 por falta de pruebas. Sin embargo, en mayo de 2025, un tribunal revocó esa decisión y lo condenó a 45 años de prisión. Hasta el momento, su reaprehensión sigue pendiente.
Enfrenta además acusaciones en la Corte del Distrito de Columbia por conspiración para traficar cocaína y heroína, así como por portar armas de fuego relacionadas con el narcotráfico. Como parte de sus sanciones, el Departamento del Tesoro de EE. UU. lo incluyó en su lista de narcotraficantes designados, bloqueando todos sus bienes y operaciones financieras en ese país.
“El Jardinero” es hoy símbolo de la evolución del crimen organizado en México, donde la eficacia operativa, las lealtades cambiantes y las alianzas impensadas están redefiniendo el mapa del narcotráfico. Su caso ilustra una convergencia peligrosa de poder, impunidad y redes transnacionales de droga.
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