"El nivel de podredumbre y omisión es evidente", señala el ministro Cossío sobre Rancho Izaguirre

El ministro en retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), José Ramón Cossío, advirtió que la existencia del centro de exterminio operado por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Jalisco es un reflejo de la crisis de violencia y desapariciones en México, así como de la posible omisión de autoridades de todos los niveles de gobierno.

En entrevista con Guillermo Ortega para Informativo NTR, Cossío calificó el caso como un "hecho gravísimo" y explicó que estos centros no solo sirven para la ejecución de víctimas, sino también como lugares de reclutamiento forzado.

"A la gente se le recluta incluso a través de anuncios en internet, ofreciéndoles trabajos. Luego son clasificados: los que no son aptos para el servicio del cártel son asesinados y cremados. De ahí el altísimo número de personas desaparecidas en el país", explicó.

Omisión de autoridades

El exministro enfatizó que la ubicación del rancho, en una zona agrícola cercana a Tequila, donde hay presencia de militares y alta afluencia de personas, hace improbable que las autoridades desconocieran su existencia.

"Evidentemente, esto se sabía, no solo por autoridades municipales y estatales, sino también federales. Había balaceras constantes, entrenamiento con armas de alto calibre. Es imposible que nadie se diera cuenta. Lo único que esto evidencia es el nivel de podredumbre que hay en la sociedad" afirmó.

Además, Cossío cuestionó cómo es que los grupos de sicarios entrenados en este lugar podían ser trasladados a otras entidades sin que las fuerzas de seguridad detectaran su movimiento.

"Aquí hay una enorme conveniencia entre particulares y autoridades para ocultar las operaciones de los cárteles. Representan una derrama económica para la región, y eso es lo que mantiene este sistema de complicidad" agregó.

Implicaciones federales

Cossío también subrayó que el caso no puede ser tratado como un delito local, ya que involucra desapariciones forzadas, uso de armas de alto calibre y crimen organizado, todos ellos delitos de competencia federal.

"Nadie puede pensar que un campo de exterminio no está vinculado con la delincuencia organizada. Además, se encontraron armas que no pueden usar civiles y una cantidad enorme de cartuchos, lo que constituye delitos de carácter federal que deben ser perseguidos de oficio por la Federación" sentenció.

Finalmente, el exministro advirtió que las cifras oficiales sobre desapariciones han sido manipuladas para minimizar la crisis.

"Aquí se ha negado la desaparición de personas y se han disminuido las cifras con dolo. Pero estos hechos dejan en claro la enorme violencia en el país y la relación de las autoridades con el crimen organizado" concluyó.

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