¿Jubilación a los 50? La apuesta del PT por beneficiar empleados del ‘viejo régimen’ del ISSSTE
La propuesta fue turnada a la Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados

El Partido del Trabajo (PT) presentó una iniciativa que ha generado debate en el Congreso y esperanza entre miles de burócratas: permitir la jubilación a los 50 años de edad para quienes cotizan bajo el llamado "régimen de décimo transitorio" del ISSSTE, es decir, los trabajadores que ingresaron antes de 2007 y no se cambiaron al sistema de cuentas individuales.
La propuesta busca reformar el artículo Décimo Transitorio de la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), vigente desde la polémica reforma de 2007 impulsada durante el sexenio de Felipe Calderón.
¿Qué propone el PT?
El planteamiento del PT contempla que los trabajadores del viejo régimen puedan jubilarse a partir de los 50 años de edad con 30 años de servicio, manteniendo su pensión vitalicia y derechos adquiridos, sin necesidad de cumplir con los 55 años establecidos actualmente como edad mínima.
“Es un acto de justicia laboral y social para quienes entregaron su vida al servicio público y que hoy enfrentan incertidumbre sobre su retiro”, señaló en tribuna el diputado Benjamín Robles, promotor de la reforma.
¿Quiénes serían beneficiados?
La medida impactaría a una población aproximada de 800 mil trabajadores activos y jubilados bajo este régimen. Se trata de maestros, enfermeros, personal administrativo y servidores públicos federales que no aceptaron el cambio al sistema de cuentas individuales (Afores) y optaron por conservar su derecho a una pensión basada en el salario promedio de sus últimos años trabajados.
Muchos de ellos han denunciado retrasos, trabas administrativas y reglas poco claras para acceder a su pensión.
El debate detrás: ¿viable o inviable?
La propuesta ha sido bien recibida por sindicatos del sector educativo y de salud, pero también ha generado cuestionamientos sobre su viabilidad financiera.
De acuerdo con expertos en pensiones, reducir la edad de jubilación implicaría una presión adicional al erario, ya que el Estado sigue cubriendo los pagos de pensión de este régimen solidario.
“La clave está en que no se trata de un nuevo derecho, sino del respeto a uno ya adquirido. Muchos trabajadores han cumplido con los años de servicio, pero no pueden jubilarse por un criterio de edad que no existía cuando firmaron su contrato”, explicó María del Carmen Galindo, abogada especialista en seguridad social.
¿Por qué es relevante ahora?
La iniciativa llega en un momento en que la discusión sobre el sistema de pensiones en México ha tomado fuerza. Tanto la presidenta Claudia Sheinbaum como el presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador, han hablado de la necesidad de una reforma estructural que garantice jubilaciones dignas.
Además, se han multiplicado los casos de trabajadores que, a pesar de cumplir los requisitos del décimo transitorio, enfrentan burocracia, incertidumbre y falta de claridad legal.
El caso más emblemático fue el de una profesora chiapaneca, quien tuvo que ampararse para obtener su pensión tras 30 años de servicio, pues tenía solo 52 años al momento de su trámite y el ISSSTE le negó el derecho.
¿Qué sigue?
La propuesta del PT ya fue turnada a la Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados. Se espera que en septiembre, con el arranque del nuevo periodo legislativo y una nueva mayoría de Morena y aliados, se retome el debate.
Para muchos trabajadores del Estado, esta reforma representa la posibilidad real de retirarse con dignidad después de décadas en el servicio público.
“No pedimos regalos, solo que respeten nuestros derechos”, concluye Teresa R., enfermera jubilada que aún espera que el ISSSTE le reconozca su pensión completa.