México en peligro: los riesgos de ser vecino de EE.UU. si estalla la Tercera Guerra Mundial

Héctor Velázquez 19 noviembre, 2024

Aunque México es un país neutral ante conflictos a gran escala, su cercanía con el gigante del Norte podría afectarlo en aspectos económicos y sociales

 ©Kaboompics.com/Nothing Ahead/Tim Mossholder - México ha mantenido una postura de neutralidad en conflictos armados internacionales.

Después de que Washington decidiera permitir que Ucrania atacara a Rusia con misiles estadounidenses de largo alcance, las insinuaciones de una Tercera Guerra Mundial han estado más fuertes que nunca. Las autoridades rusas alertaron que la medida autorizada por el presidente estadounidense Joe Biden podría desatar consecuencias que empujarían a la sociedad al desarrollo de este conflicto.

Por lo tanto, uno no puede evitar pensar en cuáles serían las consecuencias de tal acontecimiento según el territorio en que se encuentra. En el caso de México, habría ciertas cosas a considerar, tomando en cuenta que su vecino del norte sería uno de los grandes participantes del conflicto. Por ello, aquí puedes leer algunas hipótesis de lo que sucedería en territorio nacional en caso de una tercera gran guerra.

Conflictos derivados de la cercanía con EE.UU.

Debido a que México comparte una de las fronteras terrestres más largas del mundo con EE.UU., se convierte en un territorio clave para el transporte de recursos, personal militar o zona de defensa ante ataques dirigidos al hemisferio norte. Al igual que en la Segunda Guerra Mundial, el territorio nacional podría ser utilizado para la vigilancia del Golfo de México, transformando al país en un blanco de ataques directos por parte de potencias enemigas.

Otro supuesto en esta situación podría ser la migración forzada. Podría haber un incremento de extranjeros en tierras nacionales si la guerra fuera directamente en territorio estadounidense, provocando tensiones sociales y económicas.

Economía: ¿una interrupción del comercio nacional?

El 80% de las exportaciones mexicanas se van a Estados Unidos. Si una guerra sucediera, interrumpiría las cadenas de suministro, afectando sectores como el automotriz, agrícola y manufacturero. Sin mencionar una posible escasez de bienes como medicinas y tecnología.

La riqueza en recursos energéticos de México, como el petróleo, podría convertirse en un objetivo estratégico para aliados y enemigos del país de las barras y estrellas. Además, la posibilidad de ataques cibernéticos, como consecuencia de la modernización de la guerra, podría desestabilizar redes financieras, de comunicación y de energía en el país.

Impacto ambiental

En una situación hipotética donde los conflictos sean cercanos al territorio, la contaminación provocada por explosivos, armas y ataques a infraestructuras industriales tendría un impacto ambiental severo, especialmente en zonas fronterizas.

La biodiversidad de México podría verse comprometida si llegaran a destruirse hábitats importantes cercanos a regiones estratégicas, como la Reserva de la Biosfera El Pinacate y Gran Desierto de Altar, ubicada cerca de la frontera norte.

¿Y la neutralidad?

Históricamente, México ha adoptado una postura de neutralidad en conflictos internacionales. Sin embargo, al ser vecino de Estados Unidos, su situación podría complicarse. Aunque su naturaleza neutra podría aminorar daños, el impacto económico y social no sería inevitable, aún sin estar involucrado directamente en el enfrentamiento.