Quiénes son los mexicanos acusados en EE.UU. por millonarios sobornos a Pemex

Alejandra Jiménez 12 agosto, 2025

Dos empresarios mexicanos residentes en Texas son acusados de pagar sobornos millonarios a funcionarios de Pemex y PEP. Uno ya compareció ante un juez; el otro sigue prófugo

 ©Especial - Los empresarios son acusados de obtener y retener contratos millonarios, a través de sobornos a Pemex

El escándalo por sobornos millonarios a funcionarios de Petróleos Mexicanos (Pemex) y su filial Exploración y Producción (PEP) ha tomado un nuevo giro en Estados Unidos, luego de que el Departamento de Justicia identificara públicamente a dos empresarios mexicanos residentes en Texas como los principales sospechosos.

Se trata de Ramón Alexandro Rovirosa Martínez, de 46 años, y Mario Alberto Ávila Lizárraga, de 61, quienes, de acuerdo con las autoridades estadounidenses, habrían tejido durante años una red de pagos ilegales, lujosos regalos y favores para asegurar contratos con la petrolera mexicana.

Ramón Alexandro Rovirosa Martínez

Originario de México y residente legal permanente en Estados Unidos, Rovirosa vive en The Woodlands, Texas, una zona conocida por albergar a empresarios y profesionales de alto perfil.
Las investigaciones apuntan a que fue el principal operador del esquema, canalizando sobornos a funcionarios de alto rango en Pemex y PEP por al menos 150 mil dólares (unos 2.79 millones de pesos), con el fin de beneficiar a empresas vinculadas a su nombre.

Rovirosa enfrenta un cargo de conspiración para violar la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA) y tres cargos sustantivos por violaciones a la misma norma, lo que podría derivar en una sentencia máxima de 20 años de prisión.
El empresario ya compareció ante un juez federal en Texas y espera la fecha de su audiencia de sentencia.

Mario Alberto Ávila Lizárraga

Con domicilio en Spring, Texas, Ávila Lizárraga es también ciudadano mexicano y residente legal permanente en Estados Unidos.
Las autoridades lo señalan como cómplice directo en la entrega de sobornos, participando en reuniones, transferencias y negociaciones para concretar la adjudicación de contratos a las empresas favorecidas.

A diferencia de Rovirosa, Ávila permanece prófugo, y su captura es una prioridad para el Buró Federal de Investigaciones (FBI). La acusación en su contra contempla los mismos delitos y posibles penas que las de su presunto socio.

Cómo operaba la red de sobornos

El Departamento de Justicia describe un esquema en el que los acusados, junto con otras personas, buscaban influenciar a funcionarios clave de Pemex y PEP mediante pagos directos en efectivo y obsequios de alto valor.
La intención era obtener y retener contratos millonarios, asegurando la participación de las empresas vinculadas a Rovirosa en proyectos estratégicos de la paraestatal.

Además del dinero, la acusación menciona viajes, regalos de lujo y beneficios personales como parte de la estrategia para ganarse el favor de los funcionarios.

Investigación y mensaje de las autoridades

El caso está a cargo del FBI y del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (HSI), con la colaboración de la Oficina del Inspector General de la Federal Deposit Insurance Corporation.

Matthew R. Galeotti, Fiscal General Adjunto en funciones, advirtió que “no se tolerará que se enriquezca a funcionarios corruptos en detrimento del mercado justo”.
El FBI subrayó que los sobornos erosionan la confianza pública y que perseguirá este tipo de delitos “en Texas y más allá”.

Únete al canal de WhatsApp y recibe en tu celular lo más importante de México y el mundo con el análisis y la voz de Guillermo Ortega Ruiz.