¿Cuánto fentanilo consume México?
El fentanilo gana terreno en México y estas cifras lo prueban: hospitalizaciones, decomisos y subregistro
México no solo es un punto clave en la producción y exportación de fentanilo, sino que también está experimentando un aumento en el consumo interno de este opioide sintético, hasta 50 veces más potente que la heroína. Así lo revela el Informe 2024 de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) de la ONU.
Consumo de fentanilo en México: una tendencia en aumento
Según la JIFE, la demanda de tratamiento por consumo de fentanilo ha aumentado rápidamente en estados fronterizos como Baja California, Chihuahua, Sonora y Sinaloa. Antes de 2018, los tratamientos por esta droga eran prácticamente inexistentes, pero en 2023 se registraron 430 casos, lo que confirma que México se está convirtiendo en un mercado de consumo de fentanilo.
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Un informe de los Centros de Integración Juvenil (CIJ) indica que el 60% de las personas atendidas en 2023 presentaban consumo problemático de drogas. Sin embargo, aunque el fentanilo es una preocupación creciente, el cannabis, la metanfetamina y la cocaína siguen siendo las sustancias más consumidas en el país.
A pesar de este incremento, el consumo de opioides en México sigue siendo 800 veces menor que en Estados Unidos, de acuerdo con la JIFE.
Hospitalizaciones por sobredosis de fentanilo
Las cifras más recientes de la Secretaría de Salud muestran que entre junio de 2023 y diciembre de 2024, se reportaron 92 hospitalizaciones por sobredosis de fentanilo en 15 estados del país, con un promedio de cinco casos al mes.
Estados con más hospitalizaciones:
Sinaloa: 38 casos
Baja California: 22 casos
Quintana Roo: 7 casos
Ciudad de México: 5 casos
El 46% de los casos correspondieron a personas de entre 16 y 28 años, con una gran mayoría de hombres (74) en comparación con mujeres (18). De los 92 pacientes, cinco fallecieron.
Decomisos de fentanilo y reducción del tráfico
El Gobierno de México, en coordinación con Estados Unidos, ha logrado reducir en un 50% las incautaciones de fentanilo en la frontera entre octubre de 2024 y enero de 2025, según la presidenta Claudia Sheinbaum.
Sin embargo, el tráfico sigue siendo un desafío. En Nuevo León, por ejemplo, las autoridades han confiscado 150 kg de fentanilo en los últimos 18 meses, una cantidad sin precedentes en la región.
El subregistro: un obstáculo para conocer el consumo real
A pesar de estos datos, no existen registros oficiales precisos sobre el consumo exacto de fentanilo en México. La información disponible proviene de hospitalizaciones, decomisos y autopsias forenses.
Un estudio de la Fiscalía General de Nuevo León encontró que el número de cadáveres con rastros de fentanilo pasó de 47 en 2018 a 180 en 2023, lo que representa un incremento preocupante. Sin embargo, en más de un tercio de los estados no hay equipos adecuados para detectar fentanilo en autopsias, lo que sugiere que el problema podría estar subestimado.
Un equipo de investigadores del Instituto Nacional Psiquiatría Ramón de la Fuente (INPRF) detectó rastros de fentanilo en el 93% de las 59 muestras de polvo blanco “puro” recolectado en Tijuana, mezclado con heroina. Más recientemente, 126 de los casi 900 cadáveres que llegaron a la morgue de esa localidad dieron positivo por fentanilo entre marzo y diciembre de 2023.
Expansión del fentanilo en México: ¿una crisis en desarrollo?
Investigadores y expertos temen que el fentanilo siga el mismo camino que la metanfetamina, la cual inicialmente era producida para el mercado estadounidense, pero terminó convirtiéndose en un grave problema de salud pública en México.
Datos de la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (CONASAMA) revelan que, aunque los consumidores de opioides representaron menos del 2% de los 168,000 pacientes que buscaron tratamiento en 2022, el número de personas atendidas por fentanilo sigue aumentando.
El Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación han sido identificados como los principales distribuidores de fentanilo en Estados Unidos. Los precursores químicos provienen de Asia, y los grupos criminales mezclan el opioide con otras drogas como la heroína y la cocaína para potenciar su efecto.
México en riesgo de una crisis de fentanilo
Aunque México aún no enfrenta una crisis de consumo de fentanilo al nivel de Estados Unidos, el aumento en las hospitalizaciones, decomisos y presencia de fentanilo en autopsias es un indicador alarmante.
La falta de datos oficiales dificulta conocer la magnitud real del problema, pero los expertos coinciden en que es necesario reforzar la detección, regulación y prevención para evitar que el país enfrente una epidemia de sobredosis en el futuro.
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