Derrame de PEMEX en Papantla, Veracruz, afecta gravemente 12 kilómetros de ecosistema
Las afectaciones ocurrieron en una región conocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO
Un derrame de hidrocarburos en Papantla, Veracruz, ha encendido las alertas debido a una crisis ambiental y económica que ya afecta a las comunidades indígenas totonacas desde hace más de 40 días.
El incidente, causado por un oleoducto en mal estado, contaminó 12 kilómetros de un arroyo que desemboca en el Río Cazones, lo que ha ocasionado la muerte de fauna silvestre y doméstica, la pérdida de cultivos, y la contaminación de pozos artesianos, esenciales para el suministro de agua en la región.
Pobladores exigen solución
Los habitantes de Ojital Viejo y El Chote han denunciado que Petróleos Mexicanos (Pemex), responsable del oleoducto, ha implementado medidas insuficientes para mitigar los daños. Según reportes, las cuadrillas enviadas por la empresa carecen del equipo y herramientas adecuadas, lo que ha empeorado la situación.
Las comunidades indígenas de Papantla, Veracruz, padecen severas afectaciones a su salud y territorios por la extracción de hidrocarburos que realiza @Pemex, y cuando ocurren derrames de hidrocarburo la compañía ha sido omisa en la remediación expedita de las afectaciones. pic.twitter.com/GqQ0XCkURP
— No Fracking Mx (@NoFrackingMx) October 2, 2024
Incluso se ha señalado que el suelo contaminado removido fue depositado sin precauciones cerca del arroyo, permitiendo que las lluvias recientes vuelvan a arrastrar los contaminantes a los cuerpos de agua.
Organizaciones como la Alianza Mexicana contra el Fracking confirmaron, tras una inspección, la ineficacia de las medidas de Pemex, señalando que la respuesta ha sido "irregular y peligrosa". Las comunidades afectadas exigen que la empresa asuma la restauración completa del ecosistema y que se les garantice atención médica ante la posible exposición a sustancias tóxicas.
Además, se pide la intervención del gobierno para sancionar a Pemex y prevenir futuros incidentes de este tipo, de este modo, la crisis en Papantla ha dejado al descubierto la gestión irresponsable de Pemex en una región reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, donde el impacto del desastre ha puesto en riesgo la salud y el bienestar de sus habitantes, así como el equilibrio de los ecosistemas locales.