Desapareció al buscar trabajo; dejan cuerpo de adolescente en un ataúd frente a su casa en Durango
Durante meses su familia no supo nada de él, hasta que el horror tocó la puerta; fue su padre quien abrió
Un nuevo caso de desaparición forzada al ir a buscar trabajo revela la realidad a la que se enfrentan miles de jóvenes en México. El horror se hizo presente la tarde del domingo, en la colonia Villa de Guadalupe, en Durango, cuando sujetos desconocidos dejaron un ataúd con el cuerpo de un adolescente frente a una vivienda sobre la calle Emiliano Zapata. Junto al féretro, los responsables dejaron también el acta de defunción del menor.
Según testimonios recabados por autoridades locales, dos hombres llegaron en una camioneta pickup blanca y gris, bajaron el ataúd y tocaron la puerta de la casa donde vivía la familia del joven. Tras dejar el féretro y entregar el acta de defunción al padre del menor, se retiraron sin dar más explicaciones.
#Nacional |👥En Durango sujetos entregan ataúd con el cuerpo de su hijo a una familia.
— Megalópolis 🇲🇽 (@Megalopolis_MX) June 23, 2025
🏠Fue durante la madrugada de este domingo que los hombres llegaron a la casa ubicada en la colonia Villa de Guadalupe. pic.twitter.com/gicaQiskSZ
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La víctima: un joven de Santa María de Ocotán
El adolescente fue identificado como Francisco Eusebio, de 16 años, originario de la comunidad indígena Santa María de Ocotán, en el municipio de Mezquital, Durango. De acuerdo con declaraciones de familiares, el menor había viajado a Zacatecas hace cuatro meses con un amigo, con la esperanza de encontrar trabajo.
Desde entonces, no se supo más de él hasta este domingo, cuando su cuerpo fue entregado en circunstancias inusuales y dolorosas.
Aunque las autoridades no han emitido un dictamen oficial sobre la causa de muerte, los primeros informes indican que Francisco habría sido asesinado en territorio zacatecano, y que fue la misma persona que lo llevó quien se encargó de devolver el cuerpo a Durango.
La Fiscalía investiga
Elementos de la Policía Investigadora de Delitos (PID), la Unidad de Homicidios, así como peritos forenses y un agente del Ministerio Público, acudieron al lugar para realizar las diligencias correspondientes. La Fiscalía General del Estado de Durango (FGED) inició una carpeta de investigación y ordenó la necropsia de ley para determinar con precisión la causa del fallecimiento.
La escena conmocionó tanto a los vecinos de la colonia como a la comunidad de Santa María de Ocotán. La familia exige justicia y el esclarecimiento de los hechos. Mientras tanto, el caso ha encendido las alarmas sobre la seguridad de jóvenes que emigran a otros estados en busca de oportunidades laborales.
Otro caso: búsqueda de nuevas oportunidades y regresan a casa en un ataúd:
Otro caso muy similar se registró en León, Guanajuato, el 17 de junio de 2025, cuando una madre abrió la puerta de su casa y encontró un ataúd con el cuerpo de su hijo desaparecido, Luis Gerardo, de 23 años.
El joven había viajado a Jalisco por una oferta de trabajo, pero días después, tres hombres tocaron la puerta y dejaron el féretro diciendo: “Ahí se lo dejamos”. El cuerpo presentaba signos de violencia y fue entregado sin explicación alguna, lo que llevó a las autoridades a investigar un posible vínculo con el crimen organizado.
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