Katy era enfermera, fue asesina a tiros en una carnicería por su exnovio en Tonalá

Autoridades de Jalisco investigan el feminicidio de María Catalina Ramírez, una enfermera de 37 años, que fue asesinada a tiros el pasado 23 de junio, luego de tratar de refugiarse en una carnicería ubicada en la colonia Jalisco Segunda Sección, esto en el municipio de Tonalá.

De acuerdo con las primeras investigaciones, el presunto agresor fue identificado como Pedro Iván “N”, quien la habría seguido hasta el lugar y sin importar la presencia de otras personas, abrió fuego, acabando con su vida. La víctima, conocida como "Katy" por sus allegados, era madre de un adolescente y trabajaba en el hospital Valentín Gómez Farías.

De acuerdo con los reportes oficiales, la víctima recibió disparos en el tórax y el brazo. Paramédicos acudieron poco después del ataque, pero los esfuerzos por salvarle la vida fueron inútiles. Tras la agresión, el atacante huyó a bordo de una camioneta Ford F-150 color arena, lo que permitió a las autoridades iniciar su búsqueda con base en testimonios y evidencias recabadas en el sitio.

Detienen al sospechoso del feminicidio

A través de una tarjeta informativa, las autoridades confirmaron los hechos y proporcionaron más detalles sobre lo que sucedió: "cuando agentes policiales acudieron a un reporte localizaron a una mujer herida dentro de un negocio. De inmediato se solicitó la intervención de los servicios médicos. De acuerdo con las primeras indagatorias, la víctima ingresó al establecimiento buscando ayuda, pues era perseguida por un hombre. Se presume que el agresor irrumpió en el lugar, le disparó y posteriormente huyó en una camioneta Ford F-150 color arena".

El texto precisa que, tras los hechos, se emitió una orden de aprehensión contra el principal sospechoso: "con base en los elementos recabados, se solicitó una orden de aprehensión en su contra, misma que fue cumplimentada por agentes investigadores adscritos a la Vicefiscalía Especializada en Atención a Mujeres, Niñas, Niños y Adolescentes, Razón de Género y la Familia, en calles de la Población San Martín de Hidalgo, con el apoyo de la Comisaría Municipal".

Familia de Katy pide justicia por el feminicidio

Según el testimonio de la madre de Katy, el sospechoso era su expareja y la había estado acosando desde que ella decidió terminar la relación dos meses atrás. El hostigamiento incluía amenazas constantes, persecuciones y hasta la instalación de un dispositivo GPS en su automóvil para monitorear sus movimientos. La víctima ya había buscado ayuda en el Centro de Justicia para las Mujeres, pero fue rechazada al no tener lesiones visibles y no haber convivido con el agresor, lo que, según le dijeron, limitaba la posibilidad de presentar una denuncia formal.

Hoy, los familiares y amigos de María Catalina la despiden exigiendo justicia. Su historia es un doloroso recordatorio de que la violencia de género no siempre se manifiesta con golpes, y que el miedo y el acoso también matan. Su hijo, testigo directo del crimen, ahora queda marcado por un hecho que pudo haberse evitado si las alertas hubieran sido tomadas con seriedad. Mientras el proceso judicial avanza, la sociedad se pregunta cuántas mujeres más deberán alzar la voz sin ser escuchadas antes de ser silenciadas para siempre.