Osiel Cárdenas Guillén: La verdad detrás del apodo "El Mata Amigos"
Su deportación a México marca un nuevo capítulo en la vida de uno de los narcotraficantes más notorios del país.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) deportó este 16 de diciembre a Osiel Cárdenas Guillén, exlíder del Cártel del Golfo y fundador de Los Zetas, tras cumplir una sentencia de 14 años en prisión. Su deportación a México marca un nuevo capítulo en la vida de uno de los narcotraficantes más notorios del país.
Los orígenes de "El Mata Amigos"
Nacido el 18 de mayo de 1967 en Matamoros, Tamaulipas, Osiel Cárdenas Guillén escaló rápidamente en las filas del crimen organizado. Su apodo, "El Mata Amigos", proviene de su presunta implicación en el asesinato de Salvador Gómez Herrera, su compañero y entonces líder del Cártel del Golfo, para consolidar su poder.
Este apodo simboliza la traición que lo llevó a tomar el control absoluto del cártel, después de que Arturo Guzmán Decena, alias "Z1" y primer integrante de Los Zetas, ejecutara a Gómez Herrera por órdenes de Cárdenas Guillén.
Además de ‘El Mata Amigos’, Osiel Cárdenas también era identificado con los alias:
‘El Loco’.
‘El Patrón’.
‘Padrino’.
‘Memo’.
‘El Viejón’.
La creación de Los Zetas
Bajo el liderazgo de Cárdenas Guillén, Los Zetas nacieron como un grupo de sicarios de élite compuesto por exmilitares del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales (GAFE). Inicialmente, su función principal era proteger a Cárdenas Guillén y eliminar a sus competidores.
Con el tiempo, Los Zetas evolucionaron hasta convertirse en uno de los grupos criminales más violentos y sofisticados de México, dejando un legado de terror en el país.
Captura, extradición y deportación
En marzo de 2003, Cárdenas Guillén fue capturado por el Ejército Mexicano en un operativo en Matamoros, Tamaulipas. A pesar de su encarcelamiento, continuó dirigiendo el Cártel del Golfo desde prisión hasta su extradición a Estados Unidos en 2007. En territorio estadounidense, negoció con las autoridades para reducir su sentencia de 25 años a cambio de su cooperación.
Esta colaboración provocó una fractura entre el Cártel del Golfo y Los Zetas en 2010, desatando una ola de violencia sin precedentes en el noreste de México.